Juan José Gurrola / En busca del silencio-Escorpion en ascendente

 

Entrevista con Juan José Gurrola

 

SIDE A

1.- In search of Silence

2.- Nay Happiness

3.- Mr Sadness Retires

LADO A

SIDE B

1.- Sea Feathered Flute

2.- Lessen the time

3.- Hyronimus an friends

LADO B

 

This is an LP recorded by the eclectic Mexican Theater Director Juan José Gurrola in the early Seventies with various friends (Victor Fosado: Percussion, Roberto Bustamante: electric Guitar, Eduardo Guzman: Trumpet). It is an unknown record, only a few copies were made. It is a rare example of Mexican experimental music, free jazz, alternative music, at that time. I consider Gurrola a pioneer of sound art in Mexico, along with Alejandro Jodorowsky who was a good friend of his back in the sixties.


On 2007, the curator Mauricio Marcin did an exhibition of Gurrola's artistic works and he asked me if we could make a CD of this forgotten LP, but inviting electronic composers to do remixes, sound interventions or works inspired in the different tracks of Gurrola's LP. I had already suggested this to Gurrola, and so he agreed and I invited 20 Mexican people to participate. It became sort of homage to this grate interdisciplinary artist, that sadly died recently, just after the CD was published. I present also here the works of these composers.

Buy the CD!

 

Manrico Montero • In search of Silence

Manuel Rocha Iturbide • In search of Silence

Ivan Naranjo • Inside Silence

Julio Clavijo • Nay, Happiness

Machintosco • Mr. S

Arthur H. Fork • Mr. Sadness Retires

Jose Manuel Mondragón • Mr. Sadness retires effluvium state remix

Mauricio Valdéz • Sea Feathered Flute

Antonio Russek • Lessen the pain

Rogelio Sosa • Lessen the time

Taniel Morales • Desgaste

Israel M • Lessen the Hyronimus friends

Guillermo Galindo • 3-B HyronimusAnFriends

Alejandro Casales • Hyronimus N Friends

Mario de Vega • Hyronimus Cats

 

 

This is the original presentation text of the LP by Juan Lopez Moctezuma:

 

El ZEN-JAZZ DE JUAN JOSE GURROLA

En el escenario de la primavera no hay nada inferior, nada superior las florecidas ramas son por naturaleza, cortas y largas. POEMA CHINO.


La música de Juan José Gurrola es, para mí, el resultado de un satori, un momento de iluminación. Gurrola es, a la mejor sin saberlo, un músico zen-budista. El zen - dice Alan Watts en un artículo sobre el clarinetista Tony Scott - no es una teoría sino una forma de vida en la cual el practicante se percibe como perteneciente a la totalidad del universo, del cual cada individuo es expresión única. El artista zen, pone su habilidad y su instrumento - flauta o arpa, órgano o trompeta, teponaxtle o escoba - a la disposición de Tao, el Camino de la Naturaleza, y así su arte es tan natural como las nubes y las olas, que no cometen nunca errores estéticos. Así es Gurrola y así sus músicos.
Hasta donde yo se, la música de este conjunto es también básicamente jazzistica. En cada una de las interpretaciones del grupo, los músicos (Juan José Gurrola en el órgano, Roberto Bustamante en la guitarra, Mauricio Vázquez en el piano, Víctor Fosado en diversos instrumentos, Eduardo Guzmán en la trompeta) se aferran mas o menos instintivamente a las raíces últimas del jazz; en improvisaciones emocionantes, sin premeditación o ensayo, se reconstruye alteradas y paradójicamente incólumes las estructuras que han servido de centro a los templos jazzisticos. Y ahí esta de improviso el clamor del "spiritual", la tristeza del "blues", el aullido del lamento africano, o la herencia de los Exploradores: Parker y Monk, Mingus y Ornette.


Gurrola toca Jazz, Gran Jazz. Desde luego es el suyo, el único jazz en México digno de mencionarse. En nuestra capital hasta antes de Gurrola hablábamos de buenos -algunos excelentes_ intérpretes: Chilo Morán, Ravelo, Almanza, Sánchez, Ruiz Pasos. El "Arabe", los Agüeros y los Contreras, Zaragoza y Calatayud, etc. Solo que todos ellos se lanzaron a recorrer los caminos trazados por sus colegas norteamericanos y olvidaron que sin una radical, rebelde originalidad, no se va a ningún loado y que por lo demás no se puede, no vale la pena ser, un segundo Charlie Parker, o un tercer Gene Krupa o un cuarto Dave Brubeck y olvidaron también, al defender a sus continuas posturas esgrimiendo los sempiternos "hay que comer" y "después de todo en México nadie entiende de jazz" que lo importante en jazz, como en todo, es actuar sin concesiones y sin limitaciones, libre, intensamente, en la satisfacción del impulso creador, lo mejor de uno mismo. Como es el caso de Juan José Gurrola.